Los prejuicios nos han hecho suponer que los brackets son solo para niños o adolescentes, pero eso es solo un mito, la ortodoncia fija también la pueden usar los adultos. No importa la edad, lo que verdaderamente cuenta es poder arreglar los defectos dentales del paciente.
Los brackets tienen una función importante para la salud dental, y es la de corregir las mordeduras deficientes o la oclusión que se genera cuando las piezas dentales están amontonadas o torcidas.
En épocas anteriores los padres se preocupaban porque estos procedimientos eran muy costosos y solían creer que después de la juventud no se podía recurrir a estas técnicas. Sin embargo, personas mayores de hasta 70 años ya han decidido usar brackets.
Ortodoncia fija en la adultez
Entre los 40 y 50 años de edad se manifiestan las consecuencias de todas las complicaciones que no se trataron en mucho tiempo. La especialista explica que los pacientes adultos que recurren a la ortodoncia se pueden agrupar en cuatro categorías:
- Aquellas personas que no pudieron tratarse cuando eran jóvenes, ya sea por medios económicos insuficientes o porque no les detectaron ningún problema a tiempo.
- Los pacientes que quieren combatir los cambios naturales que se producen con el tiempo y cuyos cambios se perciben en la adultez, como las transformaciones de los dientes y las encías.
- Los que buscan tratamientos restauradores, como coronas o implantes tras haber sufrido extracciones, fracturas, desgastes o caries que no fueron tratadas previamente.
- Los que notan que sus dientes han sufrido desplazamientos y advierten espacios entre las piezas dentales ocasionados por enfermedades en las encías.
Problemas que corrige la ortodoncia en la adultez
Para un ortodoncista es más complicado corregir los problemas en los adultos que en los niños, porque los huesos maxilares ya están completamente desarrollados. En algunos casos hay que recurrir directamente a las cirugías para producir el cambio que se busca.
También es habitual que los adultos ya se hayan realizado otros tratamientos dentales que puedan afectar los resultados de la ortodoncia, como la endodoncia, carillas dentales o coronas o implantes. Sin embargo, no son impedimentos para empezar el tratamiento.
Algunos de los problemas que pueden solucionar los brackets son los dientes torcidos, espacios entre los dientes, apiñamiento y deficiencia en la mordida. Se le suma a esta lista la mordida cruzada, que es uno de los padecimientos más comunes.
Hasta qué edad es viable la ortodoncia
Los brackets se pueden emplear cuando el Especialista en Ortodoncia lo considere indicado. Siempre que haya indicios de maloclusión dental es ideal, con estudios previos, definir el tratamiento correspondiente para corregir el problema.
Desde adolescentes hasta personas con 70 años han recurrido a estos tratamientos dentales, que no solo se utilizan para corregir problemas estéticos sino funcionales.
Es evidente que la sonrisa es una carta de presentación, pero tras esta mirada superficial existen factores más importantes a considerar. No hay límite en cuanto a edad se refiere para estos procedimientos dentales. Si en el pasado no pudiste recurrir a los aparatos fijos, no es problema, es la hora de acudir a los especialistas. Tu autoestima te lo agradecerá.
Tipos de brackets
La estética dental de tu boca depende del resultado que logres con los brackets que elijas usar junto a tu ortodoncista. Existen dos tipos de estos aparatos fijos: los metálicos y los linguales. Todo depende de las necesidades del paciente.
Con cualquiera de ellos podrás seguir haciendo tus actividades normales. Claro, te aconsejamos dejar de consumir algunos alimentos y bebidas porque pueden dañar el material de los brackets y, obviamente, tus dientes. Evita ingerir chicles y gaseosas.
Recuerda que si se daña o cae un bracket, puedes perder todo el tiempo que has dedicado al tratamiento porque el diente puede volver a su posición inicial. Así que se trata de un trabajo en conjunto, debes comportarte lo mejor posible.
- Brackets metálicos
Son los aparatos más clásicos que usa la ortodoncia tradicional. La metodología es apoyar cada pieza sobre un diente usando un soporte de metal. Estos son los brackets fijos y son los más eficaces si quieres colocar los dientes en su posición correcta.
Con los brackets metálicos el paciente podrá eliminar los espacios entre los dientes, corregir los movimientos dentales ocasionados por accidentes, la oclusión entre las piezas dentales y la mala mordida.
- Brackets linguales
Estos se diferencian de los anteriores porque se colocan detrás de los dientes. Los beneficios son los mismos, pero la estética de la sonrisa será más eficaz. Otro de los beneficios que aportan es que son totalmente personalizables.
Después de tomar las medidas de los dientes, se fabrican los brackets y se ubican en cada pieza dental. Los resultados comienzan a verse en periodos muy cortos, por lo que no son necesarias las visitan continuas al especialista.
Sin duda alguna, la tecnología es una gran aliada para estos procedimientos. Los brackets siempre han sido excelentes amigos de la sonrisa. En la actualidad, los niños y los adultos pueden contar con ellos para cuidar su dentadura.